Como miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, reconocemos la importancia de alinear nuestras vidas con las enseñanzas de Cristo. Para los jóvenes, este camino está lleno de oportunidades únicas para crecer espiritualmente, desarrollar atributos semejantes a Cristo y fortalecer la fe. En este artículo, compartiré ideas de las Escrituras, enseñanzas dirigidas a los jóvenes y sabiduría atemporal de líderes como Brigham Young y pensadores famosos de Inglaterra.
Un fundamento de fe: Doctrina y Convenios
Una de las Escrituras más profundas que se aplica a los jóvenes se encuentra en Doctrina y Convenios 6:36, que dice:
"Mirad hacia mí en todo pensamiento; no dudéis; no temáis."
Este consejo es tan simple como profundo. Nos invita a mantener nuestro enfoque en el Salvador, especialmente en tiempos de incertidumbre. La adolescencia y la juventud suelen estar llenas de preguntas sobre la identidad, el propósito y el futuro. Sin embargo, el Señor nos recuerda que, al confiar en Él, podemos enfrentar los desafíos de la vida con confianza y fe.
Otra escritura impactante se encuentra en Doctrina y Convenios 18:10, que dice:
"Recordad que el valor de las almas es grande a la vista de Dios."
Este versículo nos recuerda que cada individuo, independientemente de sus talentos, circunstancias o luchas, tiene un valor divino. Para los jóvenes, comprender su valor a los ojos de Dios puede cambiarles la vida. Esto fomenta confianza y los anima a tratar a los demás con respeto y amabilidad.
Consejos de los líderes: Enseñanzas para los jóvenes
En un devocional dirigido a los jóvenes, el élder Dieter F. Uchtdorf enseñó:
"Dios te conoce perfectamente. Te ama perfectamente. Sabe lo que te depara el futuro y sabe la persona en la que puedes convertirte."
Este poderoso mensaje ayuda a los jóvenes a verse a sí mismos desde una perspectiva eterna. Mientras que el mundo a menudo mide el valor por la apariencia, los logros o las posesiones, el evangelio nos enseña que nuestro valor es inherente.
El presidente Gordon B. Hinckley también enseñó a los jóvenes a "mantenerse un poco más altos." Enfatizó que vivir los principios del evangelio requiere valor y resistencia, pero también trae bendiciones incomparables.
Estas enseñanzas alientan a los jóvenes a priorizar su discipulado. Al asistir al seminario, servir a los demás y guardar los mandamientos, construyen un fundamento para la alegría y la paz duraderas.
La sabiduría atemporal de Brigham Young
El 9 de abril de 1852, durante un sermón en Salt Lake City, Brigham Young declaró:
"La verdadera independencia y libertad solo pueden existir al hacer lo correcto."
Esta declaración tiene una profunda relevancia para los jóvenes en el mundo actual. Muchos asocian la libertad con la capacidad de hacer cualquier cosa que deseen, pero Brigham Young nos recuerda que la verdadera libertad viene a través de la obediencia a los mandamientos de Dios. Cuando elegimos lo correcto, evitamos la cautividad espiritual y emocional que proviene del pecado y las malas decisiones.
Lecciones de pensadores ingleses
La sabiduría de líderes de todo el mundo a menudo complementa las enseñanzas del evangelio. Por ejemplo, el poeta inglés John Milton escribió:
"La mente es su propio lugar, y en sí misma puede hacer un cielo del infierno o un infierno del cielo."
Esta cita se alinea con el principio del albedrío enseñado en el evangelio. Nuestros pensamientos y actitudes moldean nuestras experiencias. Los jóvenes que cultivan gratitud, optimismo y fe encontrarán gozo incluso en circunstancias difíciles.
Otro pensador inglés, C.S. Lewis, observó:
"No puedes retroceder y cambiar el principio, pero puedes empezar donde estás y cambiar el final."
Esta cita es un testimonio del poder del arrepentimiento. A través de la Expiación de Jesucristo, podemos alejarnos de los errores del pasado y trazar un nuevo rumbo. Este mensaje es especialmente relevante para los jóvenes, quienes a menudo sienten el peso de sus errores.
Aplicando las enseñanzas
Entonces, ¿cómo pueden los jóvenes internalizar estas lecciones y ponerlas en práctica? Aquí hay tres maneras prácticas:
1. Establecer metas espirituales diarias:
El élder David A. Bednar ha enseñado la importancia de los pequeños esfuerzos consistentes. Leer las Escrituras a diario, orar y buscar revelación personal construyen fortaleza espiritual con el tiempo.
2. Servir a los demás:
Los actos de servicio nos acercan a Cristo. Al ayudar a compañeros de clase, vecinos o miembros de la familia, los jóvenes pueden sentir el amor del Salvador obrando a través de ellos.
3. Rodearse de positividad:
Los amigos y los medios de comunicación pueden influir en nuestras acciones. Elegir compañeros edificantes y entretenimiento saludable ayuda a mantener el enfoque en una vida centrada en Cristo.
Una visión de la eternidad
El evangelio ofrece una perspectiva eterna que puede guiar a los jóvenes a través de los altibajos de la vida. En Doctrina y Convenios 121:7–8, el Señor promete:
"Tus adversidades y tus aflicciones serán solo por un momento; y si las sobrellevas bien, Dios te exaltará en lo alto."
Esta seguridad nos recuerda que las pruebas que enfrentamos son temporales. Al perseverar fielmente, podemos esperar un gozo eterno.
Conclusión
Para los jóvenes de la Iglesia, abrazar una vida centrada en Cristo significa confiar en Dios, escuchar los consejos de los líderes y encontrar fortaleza en las Escrituras. Las citas de Brigham Young, pensadores ingleses y apóstoles modernos enriquecen nuestra comprensión de este camino. Al esforzarnos por seguir al Salvador, encontraremos que nuestras vidas están llenas de paz, propósito y gozo.
Que todos nosotros, especialmente la generación en ascenso, aceptemos la invitación del Señor de "mirar hacia [Él] en todo pensamiento" y vivamos vidas dignas de Su amor.
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